CAPITULO III: UNA PRINCESA EN CARTAGENA

CAPITULO III: UNA PRINCESA EN CARTAGENA

Wendy [Rebecca Schaeffer] y su amiga Elizabeth [Laisha Wilkins] disfrutan de su primera noche en la ciudad de Cartagena de Indias, Colombia, en casa de Karen Sofía [Jeimmy Paola Vargas], ubicada en uno de los barrios más pobres de la ciudad. Pero, Wendy está feliz porque presiente que, aunque humilde, percibe un clima de sana amabilidad.
-¿Sabes, Elizabeth? Quisiera ayudar a esta pobre gente. ¿Traes el dinero del viaje?-, dice Wendy, con voz dulce.
-¿No va a pensar usted, en dárselo a esa gente?-, exclama Elizabeth, indignada.
-¡Por supuesto! ¡Ellos necesitan más de este dinero que yo…!
-¿Y como le va a explicar lo del dinero? Se supone que ellos no saben que usted es una princesa…
-¡Tienes razón! ¡Lo mejor es comportarse como un donante anónimo y ver que es lo que más necesitan!-, dice Wendy, pensativa.
-Sinceramente, creo que usted debería volver a Belgravia y cumplir con sus deberes de princesa.
-¡Shhhh! ¡Cállate! ¡Te he dicho que no vuelvas a recordarme que soy una princesa!
-Pero, es la verdad, es la princesa heredera al trono…
-¡Pues, no quiero! ¡Preferiría renunciar a mi herencia y llevar una vida “normal” como las demás!
-¡Usted no puede renunciar! ¡Es la tradición de la monarquía!
-¡Yo no he creado esa tradición! ¡Y, por favor, no me llames alteza aquí, aquí somos iguales!
Elizabeth no tiene más remedio que obedecer a la bella princesa heredera.

Pero, en ese momento, llaman a la puerta y Elizabeth corre a abrir. Es Karen Sofía, la anfitriona de la casa…
-¿To’ o, bien? Mi novio y yo vamo’ a salí a la ciudad amurallada que hay una fie’ta grande con o’que’ta, ¿Quieren ir con nosotro’?-, dice la morena.
-¡Por supuesto! ¡Sería una buena oportunidad para conocer Cartagena de noche!-, dice la hermosa princesa.
Entonces, ellas preparan sus pertenencias para ir, en el Taxi de Jairo [Jair Romero], rumbo hacia la ciudad amurallada, el lugar turístico de la ciudad. Durante el trayecto, Jairo vuelve a sintonizar la música del Joe Arroyo, ya sea, en su etapa con la orquesta de Fruko y sus Tesos, como en su etapa solista: “¡¡¡En los años mil seiscientos/ cuando el tirano mandó/ las calles de Cartagena/ aquella historia vivió…!!!” (“Rebelión.” Autor e intérprete: Alvaro José Arroyo) Wendy se deja llevar por la contagiosa melodía y baila en su asiento. Elizabeth siente fastidio por esa música.
-¡Ajá, Wendy! ¡Veo que le gu’ta la música de “El Joe”!-, dice Karen Sofía.
-¡Es música muy contagiosa y esta música invita mucho a bailar!-, responde Wendy.
-¡Ajá, Elizabeth! ¿Y no le gu’ta e’ta música? ¿No se e’cucha en su paí?-, dice Karen Sofía.
-No le haga caso… Elizabeth tiene otros gustos, màs “refinados”… jejejeje.-, comenta Wendy. Elizabeth se incomoda.
-¡Yo escucho música brillante y elaborada!-, responde Elizabeth, con desprecio.
-¡Ay, chica, pué creo que tu amiga es muy aburrida! ¡Animo! ¡La vida e´ para pasarla rico!-, dice la morena, bailando en su asiento, al compás de la contagiosa melodía. Y continúan con el trayecto, escuchando la música de “El Joe”.

Por su parte, en el bar restaurante “Los Buenos Tiempos”, los socios, aburridos, porque no ingresa la gente, deciden cerrar temprano y unirse a la fiesta… pero, Jacob les dice a sus bellas hermanitas que se regresen a casa…
-Ay, hermano, ¿Por qué no podemos ir a la fiesta?-, dice Megan [Lucía Ramos], la hermana mayor.
-¡En esa fiesta hay muchas personas mayores, además, no es lugar para dos niñas como ustedes! ¡Además, tienen que acostarse temprano porque tienen que ir a estudiar!-, dice Jacob.
-¡Ya, hermanito, Ashley y yo no somos unas niñas! ¡Tengo ganas de pasarla rico!-, dice Megan, moviendo los hombros.
-¡Ejem! ¡Jacob, amigo, creo que Megan tiene razón! ¡Ellas ya no son unas niñas!-, interviene José Julián [David Zepeda].
-¡No te metas, José Julián! ¡Como se ve que no tienes hermanos menores!-, exclama Jacob.
-¡Ejem!-, interviene Jacqueline [Estefanía Borge], -¡Creo que José Julián tiene razón… la fie´ta e´ pa’a too el mundo! ¡Y ellas están en su derecho de divertirse sanamente! ¡Sino e’ mole’tia, me ofre’co a “chaperonear” a las chicas, ¿Qué dice?
La bella Jacqueline le guiña el ojo a Don Jacob. Entonces, él decide aceptar la propuesta de la bella mujer.
-¿Puedo ir yo también? ¡Me cuentan que las fiestas en Cartagena son inolvidables!-, interviene Rashid.
-¡Claro, Rashid! ¡Puedes venir con nosotros!-, interviene José Julián.
-¡Està bien, pero, cuidado con sobrepasarse con mis hermanitas!-, advierte Jacob.
-¡No se preocupe, jefe, las cuidaré como si fueran mis propias hermanitas!-, dice Rashid. Mientras, Megan, discretamente, le mueve los hombros y le guiña el ojo al muchacho. Rashid se pone nervioso con los coqueteos de tan hermosa muchacha. Por su parte, Ashley [Renata Notni], la otra hermana, suspira en secreto por José Julián. Entonces, entre todos, se acomodan para ingresar en la camioneta destartalada de Jacob con rumbo hacia la fiesta, cerca de la torre de reloj y el portal de los dulces, en los límites de la ciudad amurallada.

Por su parte, Wendy llega a la ciudad amurallada con Elizabeth, Jairo y Karen Sofía. Wendy está emocionada porque se trata de su primera fiesta secular y quiere llevarse un bonito recuerdo de ese momento. Y le pide a Elizabeth para que le tome una foto con sus nuevos amigos, Jairo y Karen Sofía. En el lugar, hay una tarima donde toca una orquesta que canta lo mejor de la música tropical: “Porque es que te recientes/ Si apenas he llegado/ Sabes que estaba ausente/ Y mi amor no ha cambiado…” (“El Ausente”, letra: Isaac Villanueva, Intérprete: Fruko y sus Tesos). Karen Sofía y Jairo ya comienzan a bailar, moviendo los hombros, al ritmo de la contagiosa melodía. Wendy empieza a moverse. Quiere bailar.
-¡Ajá, Wendy! ¿Quiere bailá e’ta pieza conmigo?-, le pregunta Jairo.
-¡Estoy encantada! ¡Claro, sino es molestia con Karen Sofía!-, responde la bella Wendy.
-¡Claro que no, chica! ¡Puede bailá con mi novio! ¡Pero, na’a de bailá apreta’o!-, dice la morena.
Entonces, Jairo saca a bailar a la bellísima princesa. El hombre la anima a la muchacha a mover los hombros y las caderas, al compás de la melodía. Mientras, Karen Sofía le habla a Elizabeth que está aburrida…
-¡Ajá, chica! Y tú, ¿No quiere´ bailá!-, dice la morena.
-No, gracias, no me gusta. ¡Además, no hay nadie con quién bailar!
-¡Ay, chica, si aquí, hay mucho’ hombre soltero que quiere bailar con una bella jovencita como u´ted! ¡Mire! ¡Allí viene´ uno´ bueno´amigo´!-, dice la morena, señalando a Jacob, José Julián y Rashid junto con las chicas. De pronto, Elizabeth siente una extraña sensación al ver a José Julián. Karen Sofía los presenta a Elizabeth antes los demás.
-¡Ajá! ¡Quiero presenta’le a Elizabeth, una amiga que viene desde muy lejos, de Belgravia!-, exclama Karen Sofía.
-¿Y donde queda eso?-, interviene Jacqueline.
-¡Ejem! ¡Es un país muy pequeño ubicado en Europa!-, responde Elizabeth.
-¡Si, es una de las pocas monarquías existentes en el mundo!-, interviene Ashley.
-Y tú, ¿Cómo sabes tanto, cerebrito?-, interviene Megan, celosa.
-¡Lo averigüé por Internet!-, responde Ashley. Rashid está fascinado por la cultura de Ashley. Mientras, José Julián decide cambiar la conversación.
-Que curioso, Karen Sofía, pero, tu amiga me recuerda mucho a Maripaz… una amiga que conocí en México.
-Y, la verdad, te pareces mucho a Iván, el marido de mi hermana Lucía.-, dice Elizabeth, guiñándole el ojo.
-¡Ejem! ¡Dicen que en el mundo, hay un doble exacto a uno!-, interviene Ashley.
-¡Oye, José Julián, esta linda chica quiere bailá con un hombre guapo como tú!-, dice Karen Sofía.
-Si, claro. Linda muchacha, ¿Aceptarías bailar esta pieza conmigo?-, dice José Julián, con voz suave y galante.
-Encantada.-, responde la bella Elizabeth, mirando al chico con embrujo y fascinación.
Entonces, los dos se dirigen a la pista de baile para bailar al compás de una alegre melodía.: “Tus besos son/ tus besos son/ como caramelo/ caramelo/ Me hacen llegar al cielo/ Me hacen hablar con Dios.” (“Boquita de Caramelo”, intérprete: Rodolfo y los Hispanos). Megan, le guiña el ojo a Rashid en señal de sacarlo a bailar, y los dos se retiran escondidos, aprovechando que Jacob está distraído por la música y el ambiente.

En la pista de baile, Wendy, que sigue bailando con Jairo, está impresionada que su amiga Elizabeth haya dejado sus complejos y animarse a bailar esta música…
-Vaya, Elizabeth, ¡Qué bien bailas! ¿Y quién es tu galán?-, exclama Wendy, bailando.
-Su nombre es José Julián y es amigo de Karen Sofía. José Julián, ella es Wendy… mi amiga-, responde Elizabeth.
José Julián besa la mano de la hermosa Wendy.
-Wendy… ¡Qué nombre más bonito! ¡Apropiado para una muchacha hermosa como tú!-, dice José Julián, fascinado.
-Gracias.-, responde Wendy, muy sonriente.
En ese momento, Jacob aparece buscando aparatosamente por su hermana Megan.
-¡Oigan! ¿Alguien ha visto por ahí a Megan? ¡No la encuentro por ahí!-, exclama Jacob.
-¡Vamos, no seas tan sobreprotector, Jacob, deja en paz a Megan que es toda una jovencita!-, dice José Julián, -¡Y mira, quiero presentarte a Wendy, una amiga de Elizabeth! ¡Ella también viene de Belgravia!

En ese momento, Wendy voltea la mira hacia Jacob. El siente una extraña sensación al mirarla, como si la hubiera conocido desde hace tiempo, y siente celos al ver como el viento revolotea la frondosa cabellera de la bella jovencita.
-Mucho gusto, soy Jacob.-, dice el hombre, extendiéndole la mano para saludarla mientras la mira fijamente a los ojos.
-Es un gusto. Mi nombre es Wendy.-, dice la bella muchacha, recibiéndole la mano.
-Wendy… qué lindo nombre… para una bella muchacha como tú…-, exclama Jacob.
-¡Ejem! ¡Cuidado, hermano, que yo dije primero esa frase!-, interviene José Julián, en tono de broma. Todos se ríen.
-Oye, Wendy, ¿Aceptarías bailar esta pieza conmigo?-, dice Jacob.
-Acepto encantada.-, dice Wendy, guiñándole el ojo al hombre.
En ese momento, Wendy y Jacob se retiran de la presencia de los demás y comienzan a bailar al compás de una bella melodía: “Baila… baila… bailame la suavecita/ Mírame, sígueme y acósame/ que la cumbia es sabrosita/ Si la bailas sueltecita y abriendo los brazos.” (Autor: Víctor Gutiérrez, intérprete: Manduko). Mientras tanto, aprovechando una distracción de Karen Sofía, Jairo intercambia miradas coquetas con Jacqueline. Pero, Ashley, la otra hermana, si se da cuenta de las miraditas entre Jairo con Jacqueline, pero, prefiere no decir nada.

Mientras tanto, en un cuarto de Hotel, Chloe [Rosie Huntington Whiteley] sigue, completamente desnuda, en su idilio de amor con el pelirrojo, que es igualito al príncipe Harry de Inglaterra...
-Oh, Chloe… qué linda eres… me fascinas… me encantas…-, dice el pelirrojo, besando el bello cuerpo desnudo de ella.
Ella está pensativa. Aunque disfruta mucho del momento, siente que algo le falta para llenar su vida. De pronto, el hombre se levanta de la cama. Ella, sorprendida, le pregunta al muchacha…
-¡Espera! ¿Por qué te vas? ¿No estás disfrutando del momento?-, dice la bella muchacha.
-¡Al contrario, me fascina vivir este momento, pero, tengo que retirarme…! ¡Hay una fiesta en la ciudad amurallada y no quiero llegar tarde!-, dice el pelirrojo.
-¿Una fiesta? ¡Espera! ¡Yo voy contigo!-, dice la bella muchacha, levantándose desnuda de la cama.
-Está bien. Ya verás que vamos a pasarla “rico.”-, dice el pelirrojo.
Entonces, la bella muchacha se viste rápidamente, con minifalda y escote, y los dos toman un Taxi con dirección a la fiesta en la ciudad amurallada.

Por su parte, Wendy y Jacob siguen bailando al compás de la alegre melodía. En ese momento, Megan ve a la pareja y se sorprende al ver a su hermano, bailando con extraña…
-¿Qué hace mi hermano bailando con esa mujerzuela?-, exclama Megan, indignada.
-Su nombre es Wendy y es una amiga de Karen Sofía que llegó del extranjero.-, responde José Julián.
-¡Y tu…! ¡No le dices nada a Jacob! ¡Pero, si fuera yo la que bailaría con otro, si me llamarían la atención!-, dice Megan.
-No, prefiero dejarlos a ellos bailar tranquilos. ¿No ves que la están pasando rico?-, dice José Julián. En ese momento, viene Elizabeth y el hombre presenta a las dos chicas. Megan se queda impresionada por el collar de Elizabeth (ella si se da cuenta de esos detalles), y se da cuenta que es fínisimo. Elizabeth dice: “Es un regalo del rey de Belgravia.” En ese momento, la palabra “rey” despierta los bellos ojitos de Megan, ¿Vienes de la realeza?
CONTINUARA…