CAPITULO XII: UNA PRINCESA EN CARTAGENA
CAPITULO XII: UNA PRINCESA EN CARTAGENA
Esa mañana, Jacob [Jon-Erik Hexum] deja a Wendy [Rebecca Schaeffer] y sus bellas hermanitas, Megan [Lucía Ramos] y Ashley [Renata Notni] en el colegio “Gimnasio Altair.” Al llegar al colegio, pues, él se despide de ellas pero, en ese momento, aparece Berenice [Carla Cardona], la hermosa psicóloga del colegio, y lo besa impulsivamente a Jacob, desconcertando a Wendy…
-¡Mi amor! ¡Qué bueno que te veo!-, dice la guapa Berenice, besando con desmedida pasión al hombre. Wendy trata de ocultar sus celos por ver a Jacob besando a una hermosa mujer. Jacob siente placer al sentir los besos de Berenice.
-¡Ejem! ¡Berenice! ¡Como estás! ¿Lista para una nueva rutina escolar?-, interviene Wendy.
-¡Por supuesto, Wendy! ¡La vida no puede ser mejor para mí! ¡Tengo un buen trabajo y, finalmente, volví con el hombre que siempre he amado!-, dice Berenice, abrazando a Jacob.
-Si, claro. Felicitaciones.-, dice Wendy, con desánimo.
-Mi amor, ¿Qué te parece si hoy vamos a tu apartamento y volvemos a hacer el amor como la otra vez?-, dice Berenice, haciendo caricias a Jacob, pero, él está enmudecido. No sabe que decirle y mira a Wendy, avergonzado.
En ese momento, Wendy regresa a la tierra. Sabe que su amor por Jacob es imposible, porque él volvió con Berenice, su ex novia. ¡Qué tonta e ilusa ha sido! En ese momento, suena el timbre para formación y Jacob se retira. Berenice le guiña el ojo a Jacob y se retira de su presencia. Jacob suspira por Berenice. Ashley y Megan también se despiden de su hermano y se dirigen al patio para formación. Pero, Wendy decide encarar a Jacob…
-¿No deberías ir a clases, Wendy?-, pregunta Jacob.
-¡No me voy hasta exigirte una explicación!-, exclama Wendy.
-¿De qué estás hablando?
-No entiendo… ayer me invitas a una cita romántica, haciéndome declaraciones de amor… ¡Y qué veo! ¡Te besuqueas con Berenice, una gran muchacha! ¿Qué es lo que pretendes, Jacob?
-Wendy, discúlpame… no fue mi intención…
-¡Eres un ser despreciable! ¡Como se te ocurre jugar con los sentimientos de Berenice… y con los míos!
-En serio, Wendy, realmente me gustas… me gustas mucho…
-Pero, te acostaste con Berenice… dime, ¿Qué es lo que pretendes para estar con nosotras? ¡Dímelo!
-Discúlpame, no sé que me pasó… estaba confundido porque no quisiste hacer el amor que, desesperado, busqué que alguien me cobijara, y fue cuando apareció Berenice y nos dejamos llevar…
-¡Y lo dices con ese cinismo…!
-¡Soy hombre! ¡Tengo que satisfacer mis necesidades!-, exclama Jacob.
-¡Entonces, satisface tus necesidades con Berenice, porque, en mi caso, no quiero verte en mi vida! ¡Eres despreciable! ¡Permiso! ¡Tengo que ir a mi clase!-, responde Wendy.
-¡Te olvidas que tienes este trabajo gracias a mí! ¡Sino fuera por mí, tú estarías pateando piedras en la calle!
-Lo sé, y te lo agradezco, pero, eso no es excusa para que tú no estés jugando con los sentimientos de la gente que más te quiere. Cambia, Jacob, cambia. Permiso.
La hermosa Wendy le da la media vuelta y se retira de la presencia del hombre. Jacob suspira al ver como el viento revolotea la hermosa cabellera de Wendy, y después, él se sube a su camioneta del 50, con dirección hacia su trabajo en el restaurante.
-¡Ejem! ¡Berenice! ¡Como estás! ¿Lista para una nueva rutina escolar?-, interviene Wendy.
-¡Por supuesto, Wendy! ¡La vida no puede ser mejor para mí! ¡Tengo un buen trabajo y, finalmente, volví con el hombre que siempre he amado!-, dice Berenice, abrazando a Jacob.
-Si, claro. Felicitaciones.-, dice Wendy, con desánimo.
-Mi amor, ¿Qué te parece si hoy vamos a tu apartamento y volvemos a hacer el amor como la otra vez?-, dice Berenice, haciendo caricias a Jacob, pero, él está enmudecido. No sabe que decirle y mira a Wendy, avergonzado.
En ese momento, Wendy regresa a la tierra. Sabe que su amor por Jacob es imposible, porque él volvió con Berenice, su ex novia. ¡Qué tonta e ilusa ha sido! En ese momento, suena el timbre para formación y Jacob se retira. Berenice le guiña el ojo a Jacob y se retira de su presencia. Jacob suspira por Berenice. Ashley y Megan también se despiden de su hermano y se dirigen al patio para formación. Pero, Wendy decide encarar a Jacob…
-¿No deberías ir a clases, Wendy?-, pregunta Jacob.
-¡No me voy hasta exigirte una explicación!-, exclama Wendy.
-¿De qué estás hablando?
-No entiendo… ayer me invitas a una cita romántica, haciéndome declaraciones de amor… ¡Y qué veo! ¡Te besuqueas con Berenice, una gran muchacha! ¿Qué es lo que pretendes, Jacob?
-Wendy, discúlpame… no fue mi intención…
-¡Eres un ser despreciable! ¡Como se te ocurre jugar con los sentimientos de Berenice… y con los míos!
-En serio, Wendy, realmente me gustas… me gustas mucho…
-Pero, te acostaste con Berenice… dime, ¿Qué es lo que pretendes para estar con nosotras? ¡Dímelo!
-Discúlpame, no sé que me pasó… estaba confundido porque no quisiste hacer el amor que, desesperado, busqué que alguien me cobijara, y fue cuando apareció Berenice y nos dejamos llevar…
-¡Y lo dices con ese cinismo…!
-¡Soy hombre! ¡Tengo que satisfacer mis necesidades!-, exclama Jacob.
-¡Entonces, satisface tus necesidades con Berenice, porque, en mi caso, no quiero verte en mi vida! ¡Eres despreciable! ¡Permiso! ¡Tengo que ir a mi clase!-, responde Wendy.
-¡Te olvidas que tienes este trabajo gracias a mí! ¡Sino fuera por mí, tú estarías pateando piedras en la calle!
-Lo sé, y te lo agradezco, pero, eso no es excusa para que tú no estés jugando con los sentimientos de la gente que más te quiere. Cambia, Jacob, cambia. Permiso.
La hermosa Wendy le da la media vuelta y se retira de la presencia del hombre. Jacob suspira al ver como el viento revolotea la hermosa cabellera de Wendy, y después, él se sube a su camioneta del 50, con dirección hacia su trabajo en el restaurante.
Pero, camino al restaurante, él vuelve a encontrarse con Chloe [Rosie Huntington-Whitley], completamente desnuda. La hermosa mujer le guiña el ojo y él, emocionado, detiene la camioneta y la mira, como si estuviera hipnotizado.
-Hola guapo, ¿Cómo estas? ¡Qué rico volvernos a encontrar! ¿Verdad?
Jacob no dice nada. El está impávido de ver a esa hermosa y deslumbrante mujer.
-¿Qué te pasa, guapo? ¿Por qué no dices nada? ¿Te comieron la lengua los ratones?
-Eh… eh… estás desnuda…
-Oh, si, disculpa… ejem… es que me volvieron a asaltar y me dejaron así.-, dice la hermosa mujer, moviéndole los hombros y las caderas mientras se arregla su larga y sedosa cabellera. Jacob está boquiabierto de ver a Chloe y no dice nada, y es cuando le abre la puerta de su camioneta y la hermosa muchacha se sube a su auto. Durante el trayecto, Chloe cruza las piernas y le guiña el ojo a Jacob, que comienza a sudar aparatosamente mientras su corazón le acelera rápidamente… “¡Uf! ¡Hace calor aquí! ¿No?” Chloe, discretamente, le hace una caricia en sus partes íntimas, haciendo que él frenara aparatosamente la camioneta.
-¡Cuidado, Chloe, que estoy manejando!-, exclama Jacob.
-¡Oops, discúlpame, guapo! ¿Me perdonas?-, dice Chloe, mientras le mueve los hombros y le guiña el ojo. Jacob se derrite ante los guiños con esa hermosa mujer. Entonces, ella lo llena de caricias en todo su cuerpo: “No me tengas miedo, guapo, que yo no muerdo…” Jacob siente placer por las caricias de esa hermosa mujer que, de repente, se lanza contra ella y comienza a besarla en la boca, el cuello, la nuca, mientras acaricia suavemente su hermoso rostro… de repente, él mira esclarecerse el bello rostro de Wendy y, de pronto, se retira de la presencia de ella. Chloe está sorprendida.
-¡Jacob! ¿Qué te pasa? ¿No te gusto, acaso?-, responde la bella Chloe, con la boca abajo, y los hombros caídos de la desilusión, haciéndose rulitos en su larga y rubia cabellera.
-Lo siento, Chloe… eres muy bella… despiertas mi pasión pero… no puedo… lo siento. Te dejo en tu Hotel.-, dice Jacob, mientras ella le hace caricias en su cuerpo, pero, él le hace el quite suavemente de su mano.
-¿Acaso te gusta otra?
-Estee… Vamos, te llevo a tu Hotel.-, dice Jacob, con la mano en el volante. En ese momento, Chloe lo abraza y llena de besos, pero, él le hace el quite con una mano, empujándola hacia un costado de la camioneta. Ella se indigna.
-¡Qué te pasa, ah! ¡Por qué me empujas!-, exclama Chloe.
-¡Perdóname, por favor! ¡Perdóname! ¡Pero, te dije que me dejaras tranquilo!-, exclama Jacob, desesperado.
-¡Snif! ¡No me quieres! ¡Bueno, entonces, me iré de tu vida!-, exclama Chloe, abriendo la puerta. Pero, él la contiene.
-¡Espera, Chloe! ¡No puedes salir a la calle así en “peloto”! ¡Vamos, te llevo a tu Hotel!
-¡Solo dime que me quieres y te dejo tranquilo!-, exclama Chloe.
-¡Está bien! ¡Te quiero mucho, Chloe! ¿Tranquila?
En ese momento, ella lo mira, levantando una ceja, con malicia, y de repente, lo besa en la boca, mientras intenta desabotonarle la camisa. Jacob se dejar llevar por la pasión de Chloe pero, de pronto, se detiene…
-Espera, Chloe, ¿Por qué mejor vamos a tu Hotel y continuamos este bello momento? No es bueno que nos vean de esta manera. ¿No te acuerdas lo que pasó la otra vez con el Policía?
-Tienes razón.-, responde Chloe, cruzando las piernas y frunciendo sus labios para mandarle un beso volado. Jacob se incomoda y le da un frío beso para tranquilizarla. Entonces, Jacob enciende el motor de su camioneta del año 50 para retirarse hacia el Hotel, pero, durante el trayecto, Chloe le hace unas caricias en el hombro de él. El siente placer por las caricias de esa hermosa mujer, pero, trata de controlar sus deseos, para no tener distracciones en el manejo. Finalmente, llegan al Hotel de Chloe donde, rápidamente, Jacob la baja cargándola de la camioneta y se la lleva hasta la recepción y se la entrega a un botones. Jacob le dice que espere pero, aprovecha la distracción para retirarse del Hotel y subirse a su camioneta. En la camioneta, Jacob respira aliviado que, al fin, se ha podido librar de Chloe… pero, en el fondo, piensa en sus momentos de pasión con ella. Y después, Jacob se dirige al bar restaurante “Los buenos tiempos.”
Jacob no dice nada. El está impávido de ver a esa hermosa y deslumbrante mujer.
-¿Qué te pasa, guapo? ¿Por qué no dices nada? ¿Te comieron la lengua los ratones?
-Eh… eh… estás desnuda…
-Oh, si, disculpa… ejem… es que me volvieron a asaltar y me dejaron así.-, dice la hermosa mujer, moviéndole los hombros y las caderas mientras se arregla su larga y sedosa cabellera. Jacob está boquiabierto de ver a Chloe y no dice nada, y es cuando le abre la puerta de su camioneta y la hermosa muchacha se sube a su auto. Durante el trayecto, Chloe cruza las piernas y le guiña el ojo a Jacob, que comienza a sudar aparatosamente mientras su corazón le acelera rápidamente… “¡Uf! ¡Hace calor aquí! ¿No?” Chloe, discretamente, le hace una caricia en sus partes íntimas, haciendo que él frenara aparatosamente la camioneta.
-¡Cuidado, Chloe, que estoy manejando!-, exclama Jacob.
-¡Oops, discúlpame, guapo! ¿Me perdonas?-, dice Chloe, mientras le mueve los hombros y le guiña el ojo. Jacob se derrite ante los guiños con esa hermosa mujer. Entonces, ella lo llena de caricias en todo su cuerpo: “No me tengas miedo, guapo, que yo no muerdo…” Jacob siente placer por las caricias de esa hermosa mujer que, de repente, se lanza contra ella y comienza a besarla en la boca, el cuello, la nuca, mientras acaricia suavemente su hermoso rostro… de repente, él mira esclarecerse el bello rostro de Wendy y, de pronto, se retira de la presencia de ella. Chloe está sorprendida.
-¡Jacob! ¿Qué te pasa? ¿No te gusto, acaso?-, responde la bella Chloe, con la boca abajo, y los hombros caídos de la desilusión, haciéndose rulitos en su larga y rubia cabellera.
-Lo siento, Chloe… eres muy bella… despiertas mi pasión pero… no puedo… lo siento. Te dejo en tu Hotel.-, dice Jacob, mientras ella le hace caricias en su cuerpo, pero, él le hace el quite suavemente de su mano.
-¿Acaso te gusta otra?
-Estee… Vamos, te llevo a tu Hotel.-, dice Jacob, con la mano en el volante. En ese momento, Chloe lo abraza y llena de besos, pero, él le hace el quite con una mano, empujándola hacia un costado de la camioneta. Ella se indigna.
-¡Qué te pasa, ah! ¡Por qué me empujas!-, exclama Chloe.
-¡Perdóname, por favor! ¡Perdóname! ¡Pero, te dije que me dejaras tranquilo!-, exclama Jacob, desesperado.
-¡Snif! ¡No me quieres! ¡Bueno, entonces, me iré de tu vida!-, exclama Chloe, abriendo la puerta. Pero, él la contiene.
-¡Espera, Chloe! ¡No puedes salir a la calle así en “peloto”! ¡Vamos, te llevo a tu Hotel!
-¡Solo dime que me quieres y te dejo tranquilo!-, exclama Chloe.
-¡Está bien! ¡Te quiero mucho, Chloe! ¿Tranquila?
En ese momento, ella lo mira, levantando una ceja, con malicia, y de repente, lo besa en la boca, mientras intenta desabotonarle la camisa. Jacob se dejar llevar por la pasión de Chloe pero, de pronto, se detiene…
-Espera, Chloe, ¿Por qué mejor vamos a tu Hotel y continuamos este bello momento? No es bueno que nos vean de esta manera. ¿No te acuerdas lo que pasó la otra vez con el Policía?
-Tienes razón.-, responde Chloe, cruzando las piernas y frunciendo sus labios para mandarle un beso volado. Jacob se incomoda y le da un frío beso para tranquilizarla. Entonces, Jacob enciende el motor de su camioneta del año 50 para retirarse hacia el Hotel, pero, durante el trayecto, Chloe le hace unas caricias en el hombro de él. El siente placer por las caricias de esa hermosa mujer, pero, trata de controlar sus deseos, para no tener distracciones en el manejo. Finalmente, llegan al Hotel de Chloe donde, rápidamente, Jacob la baja cargándola de la camioneta y se la lleva hasta la recepción y se la entrega a un botones. Jacob le dice que espere pero, aprovecha la distracción para retirarse del Hotel y subirse a su camioneta. En la camioneta, Jacob respira aliviado que, al fin, se ha podido librar de Chloe… pero, en el fondo, piensa en sus momentos de pasión con ella. Y después, Jacob se dirige al bar restaurante “Los buenos tiempos.”
Así, pasan las horas, y finalmente, llegó la hora de salida para los profesores y el alumnado del “Gimnasio Altair.” Entonces, Berenice convence a Wendy para caminar juntas por el Centro Comercial “Caribe Plaza.” Wendy está incómoda con la presencia de Berenice, porque no sabe como confesarle que se está enamorando de Jacob. En ese momento, mientras Wendy y Berenice miran las vitrinas, en ese momento, se aparece Melissa [Melissa Barrera] y reconoce a Wendy. Pero, la bella Wendy se siente incómoda con la presencia de Melissa…
-¡Alteza! ¡Como está usted! ¡Acabo de ir al Salón de belleza que usted me recomendó!-, exclama Melissa.
-Oye Wendy, ¿Por qué esta chica te dice “Alteza”?-, pregunta Berenice.
-¡Ejem! ¡Es un juego que hacemos Melissa y yo…! ¡Ella me dice “alteza” y yo le digo “su majestad”! ¡Es que nos gusta aparentar que somos parte de la realeza…!-, responde Wendy, guiñándole el ojo, de reojo. Melissa capta el juego.
-Si, claro… ¡Es un juego! ¡Nos gusta fingir que somos de la realeza!-, exclama Melissa.
-¡Se ve chévere ese juego! ¿Podría jugar? ¡Yo siempre quise ser una princesa! ¡Y que Jacob sea mi príncipe!-, exclama Berenice, mientras suspira profundamente por Jacob. Wendy se pone incómoda.
-¡Ejem! Melissa, por favor, tengo que hablar un asuntito en privado, ¿Nos disculpas, Berenice?-, dice Wendy, retirándose con Melissa hacia un rincón del Centro Comercial.
-¡Alteza! ¡Como está usted! ¡Acabo de ir al Salón de belleza que usted me recomendó!-, exclama Melissa.
-Oye Wendy, ¿Por qué esta chica te dice “Alteza”?-, pregunta Berenice.
-¡Ejem! ¡Es un juego que hacemos Melissa y yo…! ¡Ella me dice “alteza” y yo le digo “su majestad”! ¡Es que nos gusta aparentar que somos parte de la realeza…!-, responde Wendy, guiñándole el ojo, de reojo. Melissa capta el juego.
-Si, claro… ¡Es un juego! ¡Nos gusta fingir que somos de la realeza!-, exclama Melissa.
-¡Se ve chévere ese juego! ¿Podría jugar? ¡Yo siempre quise ser una princesa! ¡Y que Jacob sea mi príncipe!-, exclama Berenice, mientras suspira profundamente por Jacob. Wendy se pone incómoda.
-¡Ejem! Melissa, por favor, tengo que hablar un asuntito en privado, ¿Nos disculpas, Berenice?-, dice Wendy, retirándose con Melissa hacia un rincón del Centro Comercial.
En un rincón, Wendy platica en voz baja con Melissa…
-Discúlpame, Melissa, por no advertirte que estoy aquí de incógnito… y es que no quiero que nadie sepa que realmente soy la princesa Gwendolyn.
-¿Por qué? ¿Por qué una princesa como usted quiere vivir escondida?
-Es una larga historia, pero, ¿Podrías ayudarme a guardar el secreto. Aquí soy simplemente… Wendy.
-Está bien, alteza, perdón, quiero decir… Wendy.-, responde Melissa, guiñándole el ojo. Viene Berenice.
-¡Oigan! ¿Por qué mejor no nos vamos a “Los Buenos Tiempos”? ¡Tengo unas ganas de ver a Jacob!-, dice Berenice.
De pronto, Wendy le brillan los ojos de la emoción al mencionar a Jacob y decide aceptar la invitación. Melissa decide acompañarlas, y entonces, las tres se suben a un Taxi con dirección al restaurante bar “Los buenos tiempos.”
Mientras tanto, en el restaurante bar “Los buenos tiempos”, Jacob atiende a los clientes junto con José Julián, mientras que Jacqueline y Elizabeth amenizan la velada, cantando baladas de los 80s: “¡¡¡Tú y yo… cogidos de la mano… tú y yo… gritando nuestro amor!!!” (“Tú y yo”, intérprete: Yuri). Mientras tanto, Rashid está en la cocina preparando las órdenes, cuando en ese momento, viene Megan y le da un beso en la boca al chico. Por su parte, Ashley está sentada en la barra, suspirando por José Julián, cuando en ese momento, llega Wendy junto con Berenice y Melissa. Jacob se pone nervioso con la presencia de Wendy en el restaurante que comienzan a sudarle las manos y el cuerpo. De pronto, Berenice se lanza contra Jacob y le da un beso apasionado en la boca, poniendo celosa a Wendy. Pero, en ese momento, Melissa reconoce a Elizabeth.
-¿Elizabeth? ¡No sabía que cantabas! ¡Y lo haces muy bien! ¡Soy yo, Melissa, una ciudadana de Belgravia! ¿Puedo cantar con ustedes? ¡Pues, yo canto muy bien! ¿Quieren escuchar?-, exclama Melissa. Entonces, Jacqueline y Elizabeth se bajan del escenario y le entregan el micrófono a Melissa quién canta su interpretación de “I will survive” de Gloria Gaynor: “Once I was afraid/ I was petrified…” (Intérprete: Gloria Gaynor) Su Interpretación llama la atención de los transeúntes que ingresan al restaurante y se emocionan con la voz de la hermosa Melissa. Jacob está encantado con Melissa que, de inmediato, la contrata para que cante seguido en el restaurante.
-Discúlpame, Melissa, por no advertirte que estoy aquí de incógnito… y es que no quiero que nadie sepa que realmente soy la princesa Gwendolyn.
-¿Por qué? ¿Por qué una princesa como usted quiere vivir escondida?
-Es una larga historia, pero, ¿Podrías ayudarme a guardar el secreto. Aquí soy simplemente… Wendy.
-Está bien, alteza, perdón, quiero decir… Wendy.-, responde Melissa, guiñándole el ojo. Viene Berenice.
-¡Oigan! ¿Por qué mejor no nos vamos a “Los Buenos Tiempos”? ¡Tengo unas ganas de ver a Jacob!-, dice Berenice.
De pronto, Wendy le brillan los ojos de la emoción al mencionar a Jacob y decide aceptar la invitación. Melissa decide acompañarlas, y entonces, las tres se suben a un Taxi con dirección al restaurante bar “Los buenos tiempos.”
Mientras tanto, en el restaurante bar “Los buenos tiempos”, Jacob atiende a los clientes junto con José Julián, mientras que Jacqueline y Elizabeth amenizan la velada, cantando baladas de los 80s: “¡¡¡Tú y yo… cogidos de la mano… tú y yo… gritando nuestro amor!!!” (“Tú y yo”, intérprete: Yuri). Mientras tanto, Rashid está en la cocina preparando las órdenes, cuando en ese momento, viene Megan y le da un beso en la boca al chico. Por su parte, Ashley está sentada en la barra, suspirando por José Julián, cuando en ese momento, llega Wendy junto con Berenice y Melissa. Jacob se pone nervioso con la presencia de Wendy en el restaurante que comienzan a sudarle las manos y el cuerpo. De pronto, Berenice se lanza contra Jacob y le da un beso apasionado en la boca, poniendo celosa a Wendy. Pero, en ese momento, Melissa reconoce a Elizabeth.
-¿Elizabeth? ¡No sabía que cantabas! ¡Y lo haces muy bien! ¡Soy yo, Melissa, una ciudadana de Belgravia! ¿Puedo cantar con ustedes? ¡Pues, yo canto muy bien! ¿Quieren escuchar?-, exclama Melissa. Entonces, Jacqueline y Elizabeth se bajan del escenario y le entregan el micrófono a Melissa quién canta su interpretación de “I will survive” de Gloria Gaynor: “Once I was afraid/ I was petrified…” (Intérprete: Gloria Gaynor) Su Interpretación llama la atención de los transeúntes que ingresan al restaurante y se emocionan con la voz de la hermosa Melissa. Jacob está encantado con Melissa que, de inmediato, la contrata para que cante seguido en el restaurante.
Mientras tanto, en un rincón, Jacqueline recibe la visita de Jairo, el taxista, y los dos se besan apasionadamente, pero, para su mala fortuna, en ese momento, los sorprenden Wendy y Elizabeth. Wendy llama la atención a Jairo…
-¡No puedo creerlo! ¡Como es posible que ustedes engañen a Karen Sofía de esta manera!-, exclama Wendy.
-¡E’to no te incumbe… metiche! ¡Jairo y yo no’ gu’tamos…!-, responde Jacqueline.
-¡Un momento, usted no tiene ningún derecho de hablarle así a Wendy! ¡Zorra!-, exclama Elizabeth.
-¡Yo no soy ninguna “zorra”! ¡Vá a ve’!-, exclama Jacqueline, lanzándose contra Elizabeth para jalarle el cabello a ella. Jairo trata de parar la pelea mientras Wendy pide por ayuda. En ese momento, José Julián y Jacob separan a Elizabeth y a Jacqueline y les exigen una explicación. Wendy dice: “¡Hemos descubierto a Jacqueline y Jairo, besándose…!”
-¡No puedo creerlo…! ¡Como puedes hacerle esto a Karen Sofía!-, dice Jacob a Jairo.
-¡Usted tampoco no es ningún santo… sé de sus romances con Chloe, la hermosa reportera, y con Wendy!-, dice Jairo.
-Perdón, ¿Qué dijiste, Jairo? ¿Qué es eso de un romance entre Jacob y Wendy?-, interviene Berenice.
-¡No, Berenice! ¡Entre Wendy y yo no hay nada! ¡No le hagas caso a este hombre!-, exclama Jacob. En ese momento, Wendy se retira indignada de la presencia de los demás. Jacob corre detrás de ella para darle alcance.
CONTINUARA…
-¡No puedo creerlo! ¡Como es posible que ustedes engañen a Karen Sofía de esta manera!-, exclama Wendy.
-¡E’to no te incumbe… metiche! ¡Jairo y yo no’ gu’tamos…!-, responde Jacqueline.
-¡Un momento, usted no tiene ningún derecho de hablarle así a Wendy! ¡Zorra!-, exclama Elizabeth.
-¡Yo no soy ninguna “zorra”! ¡Vá a ve’!-, exclama Jacqueline, lanzándose contra Elizabeth para jalarle el cabello a ella. Jairo trata de parar la pelea mientras Wendy pide por ayuda. En ese momento, José Julián y Jacob separan a Elizabeth y a Jacqueline y les exigen una explicación. Wendy dice: “¡Hemos descubierto a Jacqueline y Jairo, besándose…!”
-¡No puedo creerlo…! ¡Como puedes hacerle esto a Karen Sofía!-, dice Jacob a Jairo.
-¡Usted tampoco no es ningún santo… sé de sus romances con Chloe, la hermosa reportera, y con Wendy!-, dice Jairo.
-Perdón, ¿Qué dijiste, Jairo? ¿Qué es eso de un romance entre Jacob y Wendy?-, interviene Berenice.
-¡No, Berenice! ¡Entre Wendy y yo no hay nada! ¡No le hagas caso a este hombre!-, exclama Jacob. En ese momento, Wendy se retira indignada de la presencia de los demás. Jacob corre detrás de ella para darle alcance.
CONTINUARA…
Menos mal que Jacob está reaccionando ya. Sirena40
ReplyDeleteSi, que bueno. :)
Delete¿Y dónde está Jacob que se encontró a Cloe desnuda!
ReplyDeleteEstá camino al restaurante.
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